La Vocalización Herramienta Imprescindible En El Arte De La Oratoria

Una vez que comienzas a hablar, cada persona deduce que el oyente lo comprende perfectamente. Pero muchas veces ocurre que no necesariamente nos damos a entender y se necesita la vocalización como herramienta de comunicación en el arte de la oratoria

Ocurre que aunque hablamos el mismo idioma o manejamos los mismos modismos, jergas, acentos; se nos dificulta entender al interlocutor, o nos cuesta que los demás comprendan lo que queremos decir.

Cuando es necesario hablar en público, lo idóneo es controlar cada uno de los elementos que envuelven tal situación. Sea desde el discurso, el tema, la disposición en el escenario; el feedback con el público y hasta los nervios.

Sin embargo, muchos oradores descuidan o no se percatan del ruido que puede emitir al hablar, puede interferir en hacer llegar el mensaje de forma clara y entendible al oyente. 

Claro está, que no siempre se controlarán totalmente los ruidos que podamos emitir al hablar; pero lo que sí se puede es utilizar técnicas para que la voz se emita lo más clara y entendible posible.

Vocalizar Correctamente No Es Tarea Fácil

Para todo aquel que se considera un orador o aquellos que desean hablar bien en público; vocalizar es indispensable porque su herramienta para la comunicación es la voz. 

Si no se capacita bien o no manejan técnicas para controlar y manejar la voz; puede que se les haga más difícil vencer debilidades como falta de entendimiento al pronunciar palabras poco conocidas o cuando es necesario pronunciar un lenguaje técnico. 

Por tal motivo, Delossantos Oratoria, en su curso de oratoria capacitará a los interesados a pronunciar de la forma apropiada discursos efectivos para lograr que se capte y se mantenga el interés del público en todo instante. 

Lo mismo ocurre cuando el presentador tiene una voz excesivamente baja o todo lo contrario, cuando emite un sonido demasiado alto porque genera una molestia auditiva en el ambiente.

Además de estos casos, es común escuchar presentadores que tienen una mala vocalización. Es decir, que al dirigirse al público no articula las palabras debidamente. Lo que resulta que ni las vocales, consonantes o las sílabas de las palabras se entienden completamente, por lo que es inteligible lo que se habla. 

Para cualquier orador, donde tenga que pronunciar su discurso, sea en el idioma nativo o con un idioma extranjero una adecuada vocalización cobra especial importancia.

En estas situaciones, no articular como es debido puede suponer confusión, incomprensión y se pierde la relación orador-público. Lo que genera resultados negativos como la pérdida del interés; acciones que afectan el resultado de la ponencia. 

¿Sabes Cómo Vocalizar?

Te cuesta que te entiendan cuando hablas en público o a tus oyentes se les dificulta entender lo que dices; puedes utilizar muchas técnicas para mejorar tanto la modulación como la vocalización.

Un truco realmente sencillo y efectivo es la utilización de un corcho. Y te preguntarás ¿cómo se utiliza? solo corta un corcho por la mitad, una de las partes la colocas entre los dientes delanteros y lee unos 3 a 5 minutos parte de tu discurso sin dejarlo caer. Este ejercicio es muy útil para calentar los músculos de la mandíbula y facilitar así la correcta vocalización. 

Cabe destacar, que saber vocalizar implica un trabajo duro, pero si inicias con este sencillo ejercicio verás que los resultados son sorprendentes. Con esta técnica tomarás el control de la situación y el público entenderá cada palabra.

Ejercicios Para El Orador 

Cuando escuchas a algún locutor u orador y te percatas que suprimen o alteran letras y sílabas en las palabras es porque no saben vocalizar o articular los sonidos.  En estos casos, y si no lo sabías, lo que ocurre es que los músculos faciales no están bien entrenados.

En esta acción confluyen varios factores, porque es bien conocido que al hablar, además de emitir sonidos; interviene el movimiento de la lengua, del cuerpo y hasta posición de la cabeza.

¿Qué significa esto? Que al emitir un sonido las cuerdas vocales vibran y actúan sobre el mecanismo de fonación. Y si no manejamos bien el proceso se nos hará difícil corregir esos errores de cambiar el sonido de las letras o saltarnos su pronunciación. 

Para ello, se recomienda un ejercicio fácil de realizar; solo se debe abrir la boca todo lo que pueda por unos 10 segundos y la cierra de nuevo. Se repite cinco veces en la mañana y cinco en la noche, durante cinco días. Esta acción sirve para activar los músculos faciales.

Luego, hay que dedicarse a las vocales. Primero se pronuncian separadamente, después de forma prolongada e intermitente hasta que obtenga una pronunciación clara y sonora. Y una vez dominada esta acción combine las vocales. 

Lo mismo se hace con los diptongos y triptongos. En unas ocasiones se pueden acentuar la primera vocal y en otras, la segunda hasta que se pueda pronunciarlos triptongos (tres vocales unidas), de forma separadas, ligadas y variando los acentos. 

Mejorar La Vocalización Implica Constancia

Además de los ejercicios de pronunciación, también hay que fortalecer la lengua. Para eso sáquela lo más que se pueda y luego vuelva a su posición original. Repita esto en la mañana y en la noche unas 5 veces. 

Para lograr este cometido se recomienda cantar pero solo utilizando la letra L. Una vez cumplido este ejercicio de igual manera se utiliza la R. 

¿Qué le parece silbar como ejercicio? Al silbar se está expulsando aire y sirve para aflojar los labios y a controlar la salida del aire.  También funciona el hecho de exagerar la articulación y la pronunciación de cada sílaba. Y si se topa con una palabra difícil, mucho mejor, es un gran motivo para seguir practicando.

Otros Ejercicios Para Que Te Escuchen Mejor 

Y si no le estás sacando todo el partido a tu voz, a continuación tendrás otras instrucciones que seguramente serán de utilidad, como hablar más despacio.

Ten presente que hablar rápido no tiene sentido porque no le damos tiempo a que el público asimile el tema que se está presentando. Muchos de los problemas de dicción se solucionan, en parte, hablando más despacio.

También es útil unir los labios, sin presionar los dientes, y trata de pronunciar tu discurso. Al tener poco margen para emitir sonidos te concentras más en la pronunciación. 

Y un ejercicio que ya es una tradición en el mundo de oratoria es tomar un lápiz, ponerlo en posición horizontal y morderlo. Con el lápiz entre los dientes, trata de pronunciar tu discurso moviendo los labios. 

Puede hacerlo de forma exagerada, abriendo la boca lo más posible o pronunciando lentamente para hacer hincapié en las vocales o alargar las pausas.

Recuerda que al hablar debes abrir bien la boca y tratar de pronunciar correctamente todas las sílabas, evitando unir el final de una palabra con el comienzo de la otra. Estos ejercicios, aunado con la formación que brinda Delossantos Oratoria, considerado como unos de los mejores cursos de oratoria, podrán eliminar el miedo escénico y ganar seguridad en sí mismo, perfeccionando además la vocalización como una herramienta de la comunicación.

Entradas recientes